¿Qué es una Ideología Política?
Hoy en día es común escuchar que las personas que rechazan los postulados de la última ola del feminismo o de la teoría de género se refieren a dichas corrientes de pensamiento como «ideologías«. En efecto, en muchos países los partidos políticos conservadores han acuñado el término «ideología de género» para denunciar estos sistemas de ideas contemporáneos que desafían los «valores tradicionales». De esta forma, se suele acusar a la teoría de género de ser un engaño, un intento por imponer creencias falsas en la sociedad. ¿Son la teoría de género y el feminismo formas de pensamiento ideológico? Para poder responder a esta pregunta, primero debemos responder a una pregunta más esencial. A saber: ¿qué es una ideología?
Responder a una pregunta tan compleja como «¿Qué es una ideología?» no es una tarea sencilla. En particular porque este concepto tiene una larga historia y, hasta el momento, más de un significado aceptado. Aun cuando han pasado siglos desde que el concepto fue introducido por primera vez en el debate público, ni los políticos ni los especialistas parecen ponerse de acuerdo sobre una definición común.
Sin embargo, si nos dedicamos a mirar el uso que se hace de esta noción en el lenguaje ordinario, emergen algunas características evidentes. Lo primero que salta a la vista es que tener pensamientos ideológicos es algo aparentemente indeseable. Los políticos suelen denunciar que sus adversarios sostienen posturas ideológicas, mientras que es muy raro ver que admitan que sus propios pensamientos participan de alguna ideología en particular. Así, en el discurso público, predomina una visión peyorativa de la ideología y esta es tratada como un mal indeseable.
Ideología como «Falsa Conciencia»
Tener una ideología es como tener mal aliento. Uno nunca lo tiene. Lo cierto es, sin embargo, que existen múltiples definiciones de ideología. En particular, la definición de ideología que se emplea para denunciar falsas creencias tiene su origen en el pensamiento filosófico de Karl Marx.
En efecto, la idea que la ideología es falsa conciencia, conjunto de pensamientos falsos e impuestos, tiene su origen en la filosofía alemana del siglo XIX. Para Marx, la ideología corresponde al conjunto de ideas dominantes de una época. Si bien dichas ideas tienen su origen en la realidad material, sirven para encubrirla.
Esta es la noción más clásica de ideología: la idea marxista de falsa conciencia en relación con las relaciones económicas y de producción. En otras palabras, refiere a la denuncia de Marx sobre el encubrimiento de la explotación obrera.
En la versión marxista, la ideología tiene como función hacer pasar la dominación capitalista sobre el trabajador como una relación de intercambio justa, en la que el obrero vende su fuerza de trabajo al patrón a cambio de un salario. En síntesis, según esta versión del término, la ideología corresponde a aquellas ideas que mantienen las clases dominantes para ocultar la realidad bajo un «velo».
Ideología se dice de muchas formas
A lo largo del tiempo, sin embargo, el concepto de ideología ha evolucionado y se ha alejado de forma drástica de la noción marxista «clásica». Así, cada vez se ha vuelto más complejo entender a qué nos referimos cuando hablamos de ideología.
Sería extraño pensar que, actualmente, los partidos conservadores denuncian a sus oponentes empleando términos propios de la filosofía de Marx. Es más razonable pensar, en cambio, que quienes denuncian las teorías de género como «ideologías» no están empleando la versión marxista del concepto. Como mínimo, no emplean una versión que se apega estrictamente a dicha filosofía política.
Ideología se dice de muchas formas y sus significados múltiples no siempre resultan ser compatibles entre sí. Es más, en muchas ocasiones es posible hablar de «ideologías» sin adjudicarle al término una connotación peyorativa.
Según Terry Eagleton1, la ideología es un:
«(…) texto enteramente entretejido con un material de diferentes filamentos conceptuales».
¿Qué quiere decir esto? Quiere decir que, en la mayoría de los casos, el significado del término dependerá casi exclusivamente del contexto y el uso con el que se emplee la palabra.
Teniendo esto en consideración, es posible diferencia hasta seis (6) nociones distintas de ideología:
1. Un proceso material por medio del cual se producen las ideas, creencias y valores en la vida social. Esta definición es más general y pone el énfasis en la determinación social del pensamiento. Es más neutra que la versión marxista y es comparable con la noción de «cultura».
2. Ideas y creencias que, sean verdaderas o falsas, simbolizan las condiciones y experiencias de vida de un grupo o clase en concreto. Vale decir, es la expresión simbólica de una forma de vida. En este sentido, una ideología se parece más a una «cosmovisión» o a una «religión».
Como se puede observar, estas primeras dos definiciones no representan una gran dificultad y podrían ser aceptadas tanto por políticos de derecha como por políticos de izquierda. Esto se debe a que son, más bien, definiciones neutrales. La tercera definición, en cambio, sí atiende el carácter conflictivo de la política.
3. Promoción de ciertas ideas o intereses de determinado grupo social. Estos intereses tienen relevancia para la vida colectiva, social y política. Así, ideología sería un campo discursivo en el que los grupos sociales se promueven a sí mismos y entran en conflicto. En este campo, el discurso político se vuelve estratégico y no se encuentra necesariamente apegado a la «verdad científica». El objetivo no es, necesariamente, la coherencia, sino que la persuasión de potenciales seguidores.
4. Legitimación del poder de un grupo social o una clase dominante. Aquí, la ideología se entiende como las ideas o el sistema de ideas que sirven a los poderosos para sustentar las relaciones de dominación que existen en la sociedad. Sugiere que no es suficiente con imponer un conjunto de ideas sino que se debe convencer a los grupos dominados de que su subordinación es necesaria, de modo que los vuelve cómplices. Una forma particular de entender esta forma de ideología, y que puede considerarse una quinta definición, es aquella que considera que este proceso se realiza mediante el…
5. Engaño. Los intereses de las clases dominantes se legitiman mediante la distorsión y el disimulo de la realidad. Esta forma de entender la ideología tiene sus raíces en el pensamiento marxista y posmarxista. Esta definición no considera que los discursos que se oponen a la ideología dominante tengan, ellos mismos, carácter ideológico.
6. Resultado de la estructura material y económica. La última forma de entender la ideología sugiere que esta, aun si corresponde a creencias falsas y engañosas que mantienen la estructura social, no es un discurso de la clase dominante. Alternativamente, sugiere que los grupos sociales dominados son tan responsables como los dominantes de la producción de las condiciones de vida de la sociedad, dado que la ideología es transversal a todos los grupos.
Esta es una pequeña síntesis de la discusión que actualmente existe en torno al concepto de ideología. Para trazar este recorrido, nos apoyamos principalmente en el libro «Ideología, Una Introducción» de Terry Eagleton, que podrás encontrar en la referencia al final de esta publicación.
¿Cuál es tu opinión? ¿Qué es para ti la ideología? ¿Existe algo así como una «Ideología de género»?
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